Al cumplirse 65 años de aquel acontecimiento, la Máster en ciencias Dorisbel Ramos, profesora auxiliar de la sede universitaria de la demarcación, rememoró la historia de la localidad, ubicada a 101 kilómetros de la ciudad de Santiago de Cuba.
Comentó que por su situación geográfica y las características de los ríos y el relieve, no hubo asentamientos de grupos aborígenes en la zona, de modo que los primeros resultaron de negros esclavos, escapados de las plantaciones cañeras y cafetaleras de la región.
Refugiados en estos parajes, los cimarrones se convirtieron en fuerza de trabajo para las zafras y cosechas, a quienes se sumaron personas que huían de la represión española, y dueños de tierras dedicadas al cultivo del café, renglón económico de mayor importancia del territorio, argumentó.
Mencionó que hacia el año 1952, existían 60 asentamientos poblacionales definidos con dispersos comercios, numerosas despulpadoras, secadoras y casas-almacenes para la actividad mercantil, aunque los niveles de pobreza y exclusión eran visibles.
Fue en el primer semestre de 1957, dijo, cuando se organizó en el área un núcleo del Movimiento 26 de Julio que accionaba en Contramaestre, con el fin de distribuir propaganda en los poblados Cruce de los Baños, Filé, Comecará y Bijagual, además de vender bonos para recaudar fondos y enviarlos al Ejército Rebelde.
En 1958 iniciaron las incursiones de grupos insurrectos en el territorio, y el 27 de febrero de ese año los capitanes Raúl Castro Ruz y Juan Almeida Bosque, ascendidos al grado de Comandante, reciben respectivamente la misión de abrir el II y III Frentes Orientales, este último abarcaría seis mil kilómetros cuadrados de extensión, precisó la especialista.
Destacó que el municipio, ciento por ciento obra de la Revolución, adquiere su nombre en el año 1976 con la nueva división político-administrativa, y cuenta hoy con ocho consejos populares y un conjunto de instituciones económicas, políticas, sociales y culturales.
Se refirió también al desarrollo del lugar con la existencia de 80 escuelas, 49 consultorios médicos, dos policlínicos, el 84% de las viviendas electrificadas y la mejoría considerable del fondo habitacional, prioridad del gobierno local.
En el aniversario 65 de la constitución de este baluarte guerrillero integrado en sus comienzos por 55 hombres y dos mujeres, parte indispensable del devenir histórico de las luchas cubanas por su independencia, Dorisbel Ramos destacó la valía de las personas trabajadoras, humildes y patriotas que habitan la localidad.
Como el propio Almeida expresara en una ocasión: “El Tercer Frente (…) cumplió con honor la misión que le designó el Comandante en Jefe Fidel Castro, y fue uno de los pilares de la victoria definitiva del pueblo cubano”.
La profesora manifestó, además, que es la tierra donde cayó el Padre de la Patria Carlos Manuel de Céspedes, en la que reposan los restos de combatientes del Ejército Rebelde, entre otros lugares de importancia.
Como todos los cubanos, los santiagueros multiplican el tributo de agradecimiento y respeto, desde el Mausoleo a los héroes y mártires del Tercer Frente, en especial a su jefe fundador, y a los que aún están físicamente.
