Especificó que, en estos momentos, en el país hay más de 860 000 personas afectadas por la sequía, esencialmente en las provincias orientales.
Detalló que los territorios más afectados son Santiago de Cuba, con unas 400 000 personas, más de 100 000 en Holguín, y cerca de 90 000 en Ciego de Ávila. «El Oriente está muy afectado, con excepción de Granma que tiene una mejor situación», resaltó.
En el caso de La Habana, Rodríguez Rodríguez expuso que, al momento de brindar la entrevista, unas 248 000 personas estaban sin abasto regular, principalmente en los municipios del Cerro, Centro Habana, La Habana Vieja, Plaza de la Revolución y Diez de Octubre.
Esta afectación, explicó, se debe a múltiples interrupciones en el suministro eléctrico en la zona de Cuenca Sur, la principal fuente de bombeo para estos municipios.
Aclaró que este problema con el fluido eléctrico no se debe a afectaciones por déficit de generación en la ciudad –apagones planificados–, pues las fuentes de abasto se protegen, sino a averías puntuales que se han detectado y que provocan disparos en los circuitos.
El Presidente del INRH explicó que cuando se detiene una conductora de momento, para que vuelva a los niveles normales de bombeo toma tiempo, y eso es lo que estuvo pasando en Cuenca Sur, pues con la inestabilidad eléctrica no se podía regularizar el bombeo.
Ante esta situación, la Empresa Eléctrica ha tomado acciones para su solución, que permitieron a partir del sábado reiniciar el bombeo con 16 equipos en servicio, según precisó Aguas de La Habana.
INVERSIONES, SOLUCIONES…
Rodríguez Rodríguez informó que el año anterior se ejecutaron 3 800 millones de pesos en inversiones destinadas a los diferentes programas relacionados con el abasto de agua a la población en diferentes provincias, municipios o comunidades.
Añadió que este año, se dispone de 3 200 millones de pesos para cubrir el proceso inversionista del sector, y hasta el cierre de junio se había ejecutado el 71 % de ese presupuesto.
Por ello, y teniendo en cuenta la situación con el abasto del agua en el país, explicó que se hizo la solicitud de incrementar este presupuesto para inversiones que permitan la ejecución de las obras en Santiago de Cuba y Guantánamo en pos de mitigar los efectos de la sequía.
Detalló que se han realizado obras para reducir el tiro de agua en pipas, principalmente en comunidades vulnerables. «Se ha trabajado en 217 barrios en transformación, llevando agua segura a más de 160 000 habitantes», afirmó.
El Presidente del INRH expuso que ya quedaron instalados los 722 equipos correspondientes a la primera etapa del programa del cambio de matriz energética en las estaciones de bombeo de menos de diez kilowatts.
«Estos sistemas de bombeo solar han sido instalados en zonas rurales y de difícil acceso, y han beneficiado a más de 445 000 personas, garantizando agua potable sin depender del Sistema Eléctrico Nacional», enfatizó.
Destacó que ahora se encuentran trabajando en el montaje de otros 144 equipos, de la segunda etapa del proyecto. Hasta la fecha hay instaladas 792 estaciones, y se trabaja fundamentalmente en Villa Clara, que corresponde a la segunda etapa, y en concluir el montaje de 12 equipos en zonas atendidas por la empresa Aguas Turquino de Santiago de Cuba, apuntó.
En el mes de septiembre, manifestó, deben concluirse todos los montajes para alcanzar los 866 equipos, que es el total de la primera etapa, más lo que se ha podido importar de la segunda.
Rodríguez Rodríguez aseguró que se buscan las vías de financiamiento para lograr adquirir los equipos que restan para cumplir con el programa que contempla sustituir la matriz energética en 1 312 equipos de bombeo de agua.
A la par, las tres fábricas de tuberías han sostenido el programa inversionista en medio de condiciones muy adversas, no solo por las dificultades para acceder a materias primas, sino también por el déficit energético que vive el país, comentó.
Este año se inició la producción nacional de accesorios de polietileno de alta densidad, esencial para las obras del sector, puntualizó.
También se avanza en los trasvases Centro-Este, Este-Oeste y Norte-Sur, obras estratégicas para el desarrollo agrícola y la seguridad hídrica, y se rehabilitaron plantas desalinizadoras en Cayo Largo, Cocodrilo, Caletones y Cayo Coco, garantizando agua segura en zonas costeras.
¿QUÉ NOS LIMITA?
El Presidente del INRH expuso que el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el Gobierno de EE. UU. contra la Isla es una agresión sostenida que afecta de forma directa el servicio de abasto.
«Nos impide la compra de tecnologías modernas para el tratamiento y distribución del agua, obstaculiza el acceso a piezas de repuesto, bombas, válvulas, equipos de medición; dificulta el financiamiento internacional para proyectos hidráulicos; encarece la logística, los fletes, los seguros, y limita la cooperación técnica», describió.
VOLUNTAD HDRÁULICA
En la Agenda 2030, el objetivo de desarrollo sostenible número seis persigue garantizar la disponibilidad de agua y su gestión sostenible, y el saneamiento para todos, con metas que deben alcanzarse para 2030.
Pero Cuba no debió esperar a que las Naciones Unidas lanzaran un plan de acción para garantizar el acceso al agua como un derecho de todos; el programa conocido como la Voluntad Hidráulica, impulsado por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, desde los años iniciales de la Revolución permitió el surgimiento de presas, canales magistrales y otras obras que benefician a la población, las industrias y el riego de importantes áreas agrícolas.
Se trata entonces de esa misma Voluntad Hidráulica con la que hoy se construyen trasvases, se amplían los kilómetros de conductoras, se instalan nuevos equipos de bombeo y se fabrican tuberías y accesorios en las industrias nacionales.
En mejorar cada día el servicio y garantizar la cobertura del total de la población trabajan a diario cientos de hombres y mujeres, para cumplir con la guía de Fidel cuando expresó: «La voluntad hidráulica… no es suficiente, y tiene que elaborarse toda una estrategia, no solo del desarrollo total de los recursos hidráulicos, sino también de la utilización óptima del agua».
ACCIONES PARA MEJORAR EL SERVICIO DE ABASTO DE AGUA
Entre agosto de 2024 y junio de 2025, se han concluido 585 obras hidráulicas en todo el país. Estas incluyen:
337 estaciones de bombeo, muchas en zonas rurales y de difícil acceso.
241 kilómetros de redes de abasto, llevando agua potable a comunidades que antes dependían de pipas o pozos inseguros.
64 kilómetros de redes de saneamiento, mejorando la salud ambiental de barrios vulnerables.
14 000 hidrómetros instalados en La Habana, avanzando en el control y el uso racional del agua. Estos equipos se han colocado en el sistema oeste de la capital, porque durante varios años la cuenca Ariguanabo ha tenido sequía –en este momento está en estado normal– por lo que se hace necesario la medición del agua en los municipios de Playa, La Lisa y Marianao, en lo fundamental.
Rehabilitación de sistemas en Villa Clara, Ciego de Ávila, Las Tunas y Artemisa, beneficiando a más de 2 000 000 de cubanos.