Justina también recibió el necesario sosiego que en lo espiritual se da cuando se le ratifica que no hubo muertes en Las Coloradas y en el resto de las zonas afectadas por el poderoso Huracán, "y de mi familia de Mayarí Arriba, en Segundo Frente, que se quedó incomunicada a través de la red telefónica. Una no está tranquila hasta que se convence de que la vida de los suyos está segura, lo dice quien ha luchado contra la muerte durante mucho tiempo, gracias a la medicina cubana y sin pagar un centavo", elogió esta campesina de la Sierra Maestra.
La mencionada cantidad de pacientes, continúa protegida en el Servicio de Nefrología del Hospital General Dr Juan Bruno Zayas Alfonso, una institución de referencia en el Oriente cubano, ya que varias de las especialidades médicas presentes en este centro del Sistema Nacional de Salud son de carácter regional.
Por eso, cuando el responsable de la comunicación institucional del popularmente conocido como «el Clínico», publicó en la red social Facebook las imágenes de los efectos de los vientos del Huracán en el falso techo de su lobby, los medios que insisten en desinformar sobre la realidad cubana, aseguraron que el Juan Bruno Zayas había colapsado, omitiendo que la nota aclaraba que todos los servicios se mantenían vitales y el personal asistencial no descuidaba sus deberes para con los 419 pacientes ingresados.
"Durante la jornada hubo once nacimientos, recibimos a pacientes ventilados procedentes del Hospital Militar, se realizaron cuatro cirugías de urgencia y no hubo problema alguno en los más de 20 servicios; previamente habían sido adoptadas las medidas correspondientes: traslado desde los niveles superiores hasta los más bajos de los ingresados y del equipamiento, el teatro se habilitó como centro asistencial, al tiempo que creamos una nueva sala para las puérperas y otra para Perinatología", aseveró el Dr. Joaquín López González, Director en funciones de este gigantesco Hospital fundado por el Comandante en Jefe y que tiene una dotación cercana a las 800 camas.
Durante la contingencia "no dejaron de funcionar las calderas y los grupos electrógenos de emergencia que energizan totalmente a los servicios principales y garantizan la iluminación en todo el centro; no faltaron medicamentos e insumos médicos, agua, alimentos, gas y el diésel para mantener la generación", informó el Administrador de la prestigiosa Institución.
De manera que los principales daños se concentraron en el falso techos, la caída de algunos árboles en uno de los viales de acceso, la humedad que impide el funcionamiento de la mayoría de los elevadores, "aunque las labores de desobstrucción ejecutadas luego de las lluvias de Imelda dieron al traste con las inundaciones en la planta baja, y en esta ocasión fueron leves. La mayoría de dichas situaciones han sido solucionadas", precisó.
En las 14 salas del Bloque Obstétrico y en el área de Oftalmología, todo transcurre con normalidad, afirmó la Dra Yanet González Barja, Subdirectora de asistencia médica; igualmente en Nefrología, "donde la lucha por la vida es constante y se aseguran los insumos", destacó la joven Dra Lupe De Cuba Barroso, quien ya posee esta compleja especialidad.
Rafael Rodríguez Frías, el Comunicador del Hospital, adoptó las medidas pertinentes para proteger a su madre postrada e informar al Cuba y al mundo acerca de la consagración de un personal compuesto por miles de personas, "con una cantidad importante que llevó cinco días aquí, cumpliendo con el sagrado deber de salvar vidas", reconoció López González.
Tan elevado concepto distingue al colectivo, que la Dra Dayma León Bueno, Jefa del Departamento de Higiene y Epidemiología, fue convencida por sus colegas para que también atendiera a su familia, "porque su casa fue arrasada por Melissa y eso es un problema muy trascendental, pero ella es fiel al juramento que hizo cuando se graduó, dando fe de la formación altruista de la medicina revolucionaria cubana", concluyó el Director en funciones.