De acuerdo con las declaraciones del Dr. José Alberto Silva Estrada, director de la institución hospitalaria, la alerta se recibió el martes dos de septiembre alrededor de la una de la tarde. “Fuimos llamados de forma urgente por los compañeros de la Dirección General de Salud y el servicio del SIUM, solicitando que activáramos el sistema de urgencia de nuestro hospital”, explicó el directivo.
Fotos: Cortesía del equipo de comunicación de Salud Pública provincial
El motivo de la alerta fue la presencia de un paciente pediátrico que presentaba síntomas que alarmaron a los médicos del municipio, entre ellos somnolencia, confusión, dolor abdominal mantenido y vómitos, los cuales se habían presentado de forma brusca y aguda.
Inmediatamente, se activó el protocolo de riesgo con un equipo de intensivistas del centro. “Se preparó todo el equipamiento del sistema de paro para cualquier eventualidad que pudiéramos encontrar”, detalló el Dr. Silva. Una ambulancia de urgencia trasladó con rapidez a los especialistas hasta el Policlínico de Songo-La Maya para evaluar al niño.
Segun la Dra. Yuliet Valverde Blez, Jefa del Servicio de Terapia Intensiva del hospital y quien formó parte del equipo de valoración, “Vimos un paciente de once años de edad que presentaba síntomas clínicos de una posible intoxicación por paracetamol”, señaló la especialista de primer grado en Terapia Intensiva y Emergencia.
Para entonces, el personal de salud municipal ya había iniciado las medidas generales de manejo, incluyendo lavado gástrico e hidratación amplia, y se había tomado una muestra para estudio toxicológico. Al momento de la evaluación por el equipo provincial, el niño mostraba una mejoría neurológica significativa. “Estaba despierto, consciente, orientado”, afirmó la Dra. Valverde. Se mantenía con fiebre, dolor abdominal en el hipocondrio derecho y una deshidratación ligera, pero su estabilidad hemodinámica permitió decidir su traslado al hospital de Santiago de Cuba para una vigilancia más especializada.
Tras su ingreso en la Unidad de Terapia Intensiva del Pediátrico Norte, el paciente fue reevaluado por un equipo multidisciplinario. Se confirmó la sospecha de intoxicación medicamenta y, además, se diagnosticó “un proceso infeccioso, una bacteriana adquirida en la comunidad”, para la cual se instauró tratamiento antibiótico específico.
“Evolutivamente el niño ha tenido una mejoría clínica evidente que fue progresando de manera satisfactoria”, destacó la intensivista. Debido a su mejoría clínica y hemodinámica ya fue trasladado a un servicio de terapia intermedia dentro del mismo hospital.
Actualmente, el adolescente permanece bajo observación médica, pero su estado general es satisfactorio y continúa su recuperación fuera de la unidad de cuidados intensivos.