Acompañado por autoridades gubernamentales de la provincia y del municipio capital, el también miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular llegó este viernes hasta la comunidad en transformación de Santa Rosa, ubicada en la periferia de la ciudad cabecera.

Perdomo Di-Lella visitó el consultorio del médico y la enfermera de la familia de esa barriada, y se interesó por la atención a la población, en especial de las embarazadas.

También estuvo en la escuela primaria José Tey, el hogar en construcción de Reyna Wilson, beneficiada con un subsidio, y la casita infantil de la comunidad, y elogió la marcha de este programa en la provincia, con 30 instalaciones de este tipo creadas para el beneficio de las madres trabajadores.

El recorrido del vice primer ministro, quien estuvo acompañado por Marta Elena Feitó Cabrera, ministra de Trabajo y Seguridad Social, incluyó el hogar de ancianos Santa Catalina, donde reconoció el cuidado de los abuelos que allí residen.

Durante su estancia en varias salas del hospital general docente doctor Agostinho Neto, mayor institución de salud de la provincia, llamó a trabajar de forma intersectorial para reducir la tasa de mortalidad infantil y el número de pacientes en espera de algún tipo de intervención quirúrgica.

En diálogo con directivos de la provincia y del hospital transmitió un agradecimiento a galenos, enfermeras, técnicos y todo el personal de salud pública por su labor cotidiana y el esfuerzo que realizan, a pesar de las dificultades actuales, en la prestación de servicios a la población y mantener en alto esta preciada conquista de la Revolución.

Al término de su visita a Guantánamo, Perdomo Di-Lella, acompañado de la gobernadora Alis Azahares Torreblanca, se reunió con miembros de la comisión de prevención y atención social, con quienes reflexionó sobre la importancia de materializar acciones en los planes de desarrollo que propicien mayor calidad de vida de la población.

Fueron asuntos también abordados el papel de la comunicación social en sus ámbitos organizacional, mediático y comunitario, el tratamiento diferenciado a las personas verdaderamente en situaciones de vulnerabilidad, a partir de las nuevas medidas aprobadas en el país para corregir distorsiones y reimpulsar la economía, y el programa de atención a la niñez y la juventud.