En declaraciones a la prensa el portavoz del municipio de Jenin, Bashir Matahen, señaló que los militares provocaron graves destrozos a las redes de agua y electricidad de ambas localidades.

Vídeos publicados en las redes sociales mostraron imágenes de excavadoras israelíes mientras removían las calles en el campamento de refugiados, donde viven unos 11 mil palestinos en apenas medio kilómetro cuadrado.

Por su parte, el ingeniero Asaad Sawalmeh, gerente general de North Electricity Distribution Company, visitó Jenín al frente de una delegación para inspeccionar la destrucción masiva que provocó la incursión en la infraestructura, redes y transformadores eléctricos.

Emplearemos a todo nuestro personal y nuestras capacidades para reconstruir el sistema, apuntó.

Unos mil soldados y 150 vehículos blindados iniciaron el lunes la mayor operación castrense en Cisjordania en los últimos años con el argumento de destruir a “un nido de terroristas”, como califican a los milicianos palestinos.

Durante dos días de ofensiva castrense 12 palestinos murieron, cinco de ellos menores de edad, y más de 140 resultaron heridos. También perdió la vida un militar.

Esta mañana el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Isral, brigadier Daniel Hagari, anunció el retiro de todas las tropas al señalar que se completaron todos los objetivos propuestos, incluidos la incautación de armas.

Sin embargo, la máxima figura del Movimiento de Resistencia Islámica, Ismail Haniyeh, afirmó que la operación fue un completo fracaso.