El caso del 625 Santiago-Contramaestre -que en su retorno a la capital provincial es el tren número 628- es un antiguo, pero muy confortable, coche motor al que los más viejos llaman Gascar, que presta el servicio los lunes y los jueves, y durante la semana entre los poblados de Oriente y Dos Ríos hasta la ciudad del cítrico.
Pero Idael Elías, delegado de la circunscripción 108 y presidente del Consejo Popular Candonga (Palma Soriano) está luchando para que el tren 689 continúe aliviando la situación para los que viven en Oriente, cuya estación está en malas condiciones constructivas, “porque se nos incorporaron los ferrobuses Diana que tienen menor capacidad y eso no puede significar la eliminación del gascar”.
“Yo amo mi pueblecito y defiendo a Candonga, ya coordiné con la directora de Ferrocarriles de Oriente (EFO) para revisar el asunto y he despachado con las autoridades del municipio”, nos comentó, a bordo del coche motor, el líder comunitario que aprovecha todas las oportunidades para gestionar soluciones.
Luego, nos interceptó Julio César Gascón, Jefe de la estación de la ciudad del Cauto, a tenor de que Sierra Maestra ha insistido en los temas del ferrocarril durante los últimos meses y desde el 2010 el deterioro de la instalación, inaugurada en 1991, se ha acrecentado al punto de que el salón de espera y las oficinas están inutilizables; los trabajadores hemos remendado pero, definitivamente, necesitamos de la ayuda del gobierno palmero, porque ya la EFO, luego de las acciones en Mangos de Baraguá y el Combinado San Luis, nos va a priorizar”. Sería positivo el hecho de atender la estación en el contexto de los preparativos para festejar los 210 años de la segunda ciudad más poblada e industrializada de la provincia.
De Guantánamo a San Luis -y viceversa-
Todos los días el tren 704 transporta a miles de personas y mercancías -puesto que presta el servicio de expreso- de las más de 30 comunidades que atraviesa la línea Combinado-Guantánamo. Una tripulación de vasta experiencia en la que se destacan Yoandris Spek y Alexis Machado, conductor principal, con tres décadas cada uno en el sector y que mantienen “en forma” a la locomotora estadounidense 50907, de más de siete décadas, y los cinco coches de la formación.
Este tren es de lo mejor en todo el oriente cubano, no en comodidad, sino en el cumplimiento de su itinerario; lo barato del pasaje -solo 27 pesos entre San Luis y Guantánamo- y el nivel de familiarización “del sanluisero” con las gentes de los municipios de San Luis y Songo-La Maya, en Santiago de Cuba, y El Salvador y Guantánamo, en la provincia homónima.
El ferrocarril cubano avanza, no al ritmo que necesitan la economía y la población, pero avanza. Llegar a las estadísticas anteriores al 1989, en estos momento, constituye una utopía; no obstante, en sumar y no restar está la clave para nuestra Empresa de Ferrocarriles de Oriente.