Tras ser recibido en el pórtico de la sede diplomática por el embajador del hermano país, el compañero Le Quang Long, el mandatario rindió tributo de silencio ante el retrato y las ofrendas depositadas en homenaje al destacado político, presidente de Vietnam entre los años 1997 y 2006.
«La pérdida física del entrañable compañero Tran Duc Luong, constituye un lamentable suceso y motivo de dolor para los pueblos de Cuba y Vietnam», escribió el Presidente.
«La historia —subrayó— guardará por siempre, su ejemplo y contribución al proceso de Renovación por la prosperidad del pueblo vietnamita, y su aporte al fortalecimiento de nuestras históricas y especiales relaciones de hermandad».
«En este momento de profundo dolor —redactó— trasladamos nuestras más sentidas condolencias y solidaridad al Partido, Gobierno y pueblo vietnamitas, y las hacemos extensivas a familiares, amigos y allegados al compañero Luong».
Tras rendir tributo al entrañable amigo, Díaz-Canel conversó con el embajador Le Quang Long, a quien acompañaron otros representantes de la sede diplomática.
El mandatario cubano exaltó los vínculos entre ambos países socialistas, el fortalecimiento de las relaciones y el trabajo que se desarrollan actualmente en muchos proyectos conjuntos.
El embajador Le Quang Long agradeció al Presidente por su visita a la embajada para firmar el Libro de Condolencias por la muerte del compañero Tran Duc Luong. Señaló que era una demostración, una vez más, de las relaciones ejemplares, especiales, entre Vietnam y Cuba.
Junto al Presidente, acudieron a firmar el Libro de Condolencias, el miembro del Buró Político y ministro de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla, y el miembro del Comité Central y jefe del Departamento de Relaciones Internacionales, Emilio Lozada García.