El Ministerio de Defensa de la República de Corea informó que empleará casi tres mil millones de dólares para la compra en cinco años a Estados Unidos de aviones y helicópteros de última generación como parte de la estrategia agresiva y de intimidación contra Pyongyang asumida por el presidente Yoon Suk-Yeol.

La decisión se conoció en medio del aumento de la desaprobación popular sobre la gestión del gobierno en asuntos como la grave crisis económica aun sin medidas eficaces para enfrentarla, según encuestas recientes.

Las investigaciones reflejaron también la creciente desconfianza en la población sobre una probable mejora de la difícil situación en surcorea, que este viernes amaneció con la mayor depreciación del won frente al dólar estadounidense en los últimos 13 años en cuanto a los valores diarios.

Con inquietudes sobre el endurecimiento monetario global y una recesión, el debilitamiento de la moneda surcoreana acrecienta los temores de una profundización de la desigualdad social en la nación asiática.

El efecto combinado de la subida de los precios con el descenso del valor del won y la falta de inversión en medidas efectivas contra la crisis, tendrá como las mayores víctimas a los trabajadores de bajos ingresos que se quedan sin alternativas para sobrevivir frente al indetenible encarecimiento de la calidad de vida, según un reciente artículo de opinión del Korea Times.