Para hoy domingo está prevista una donación a la Escuela Especial Jesús Betancourt, así como la inauguración de una exposición de artes plásticas, en la galería Amelia Peláez.
Mientras que en horas de la noche tendrá lugar un concierto de clausura en la Plaza Mayor, ubicada en el mismo corazón del centro histórico de esta añeja villa, la tercera de las siete primeras fundadas por los españoles en Cuba.
El primer día del evento coincidió con la celebración del aniversario 35 de la declaración por la Unesco del centro histórico urbano de Trinidad, junto al Valle de los Ingenios, como Patrimonio Cultural de la Humanidad.
La víspera se inauguró la exposición Familia Santander, legado e identidad, del reconocido fotógrafo Raúl Abreu, integrada por 23 instantáneas que recogen la historia de seis generaciones de alfareros y ceramistas en cuyas diestras manos el barro ha tomado vida.
El acucioso investigador Víctor Echenagusía se refirió a la constancia y la consagración de la familia Santander como una “Herencia transmitida de padres a hijos, permitiendo mantener viva una tradición que se mueve entre lo funcional y lo decorativo”.
“El fotógrafo Raúl Abreu logra penetrar en la piel de los protagonistas de este extraordinario legado del arte popular trinitario”, expresó.
Subrayó que el artista del lente “logra atrapar ese mundo de magia e imaginación desmedida que nos muestra no solo los rostros y las obras de esta familia sino que también logra penetrar en la piel y la sicología de los protagonistas”.
Abreu señaló que esta exposición es un reconocimiento a la Familia Santander que es expresión de cultura, tradición e identidad.
El sábado último también se inauguró en el Museo de Arqueología Guamuhaya la muestra Sabor y Arte VII: Hecho en Cuba con obras de 30 artistas cubanos de la plástica, de ellos siete de esta zona central del país, tres de los cuales estuvieron presentes.
Las propuestas incluyeron la participación de artistas nacionales y del movimiento cultural de la urbe, y la novedad fue la elaboración de una gran canchánchara, coctel que tiene entre sus ingredientes aguardiente y miel de abeja y que se bebe en una vasija de barro.