Precisamente, Artex S.A. es una empresa cubana fundada hace 35 años, que pertenece al Ministerio de Cultura y se especializa en promociones artísticas y literarias. Es decir: es la principal promotora y comercializadora del arte cubano, materializado a través de la exportación e importación de productos y servicios culturales.
“Somos placiteros de corazón y hasta siempre. La PlaSita en España, así con ese, es el primer centro cultural de Artex fuera de Cuba, dice Amarilis Pérez, gerente y directora general de La Plasita, en Reus.
En Santiago de Cuba, el encuentro con los españoles y cubano-españoles, tiene lugar a metros de la típica escalinata que sale a la calle Corona, en el centro histórico de la urbe. “Aquí al lado está mi casa”, señala Amarilis.
Y es que la reunión se desarrolla en la vivienda de la Dra. Soraida Acosta Brooks, en medio de un ambiente familiar, festivo, de continuos intercambios entre santiagueros de La Placita y los visitantes.
Amarilis nació en Santiago de Cuba, en el Callejón de Hamaca, en la calle Lauro Fuentes, en el barrio donde está enclavado el histórico parquecito conocido en la ciudad santiaguera como La Placita. Allí, desde tiempo de la Colonia, en el siglo XIX, y luego a lo largo de todas las épocas pre revolucionarias, se reunía la juventud del barrio, para tertulias habituales, enamorarse… y conspirar solapadamente, contra el dominio colonialista y después contra la tiranía de Fulgencio Batista Zaldívar.
“Mi padre, Felo Pérez, lo conocían aquí como El galán de la canción; fue solista y fundador del Orfeón Santiago; trabajó en cabarets y con muchas figuras sobresalientes del pentagrama…”, añade la figura principal del Centro Cultural La Plasita Reus-Cuba.
Rafael Pérez, hermano de Amarilis, enseña allá bailes cubanos. En un momento del encuentro también le dijo al “Sierra Maestra”:
“Realmente ha sido un trabajo bonito, no solo como empresa sino el hecho de poder hacer valer nuestra cultura cubana en un lugar tan distante como Reus, Cataluña”.
Intervine entonces la Dra. Zoraida: “Lo que ellos hacen tiene un gran significado: su familia y sus padres (se refiere a Amarilis y Rafael) desde muy jóvenes fueron aquí miembros de La Placita, bailaron en esta. El padre se alzó en las montañas orientales y formó parte del Ejército Rebelde que combatió la tiranía batistiana. Y cuando triunfó la Revolución (1.º de enero de 1959), no dejaron nunca de salir en el paseo”.
Amarilis recordó cómo grandes figuras de la música y de la danza en Cuba surgieron de la escuela que sembró Amalia Cué en La Placita. Luego explicó:
“Este es nuestro primer viaje a Cuba como Centro Cultural en Reus; trajimos, además, una modesta donación de medicamentos reunidos con el esfuerzo de todos y lo entregamos a Artex para que los haga llegar a Salud Pública.
“La Placita nos apadrinó aquí y así seguiremos por siempre; es un orgullo para nosotros poder ayudar a nuestro pueblo, a los placiteros, defender la cultura cubana…”.
Después habló Carlos Acosta Laguna, actual director del Paseo La Placita, uno de los más vistosos del Carnaval Santiaguero, quien explicó las raíces históricas del parquecito y su entorno; el aporte de la agrupación al Carnaval y a la cultura santiaguera.
En otro momento de la cita en la calle Lauro Fuentes, Amarilis explicó por qué PlaSita así con ese:
“… por pronunciación, para que tenga la cadencia en el hablar y como suena allá. Yo sé que gramaticalmente placita es con ce. Pero allá suena mejor la ese, suena musical, dulce…”.
Lisandra Mallet Portuondo, gerente de mercadotecnia y comunicación de Artex, puntualizó que “para la entidad es un honor este proyecto de La Plasita Reus-Cuba como modo de legitimar en esa localidad española, la cultura tradicional cubana y como parte de esta, el baile, la música, la gastronomía con platos de Santiago de Cuba”.
Retoma la conversación Amarilis para agregar:
“Ahora estamos aquí 19 ´plasiteros´ y lo más importante de este viaje es que vinimos los cuatro socios de La PlaSita: yo como directora; Rafael, mi hermano, que lleva la parte artística; el catalán de sentimiento cubano, Jorge Alegret Senan, mi esposo, que encarga de la parte gastronómica aprendió a hacer congrí, tostones…, y Juana, de Zaragoza, que es un puntal en el grupo pero no le gusta hablar.
El hoy Centro Cultural La Plasita, en Reus, municipio de más de 100 000 habitantes en la provincia de Tarragona, comunidad autónoma de Cataluña, comenzó a gestarse y a realizar actividades y manifestaciones culturales cubanas hace 18 años. Hoy el grupo es sumamente popular y sus instalaciones cada vez más visitadas por los reusenses y quienes llegan a la localidad.
“Es un proyecto común, familiar. Nuestro Consulado en Barcelona nos visitó y le gustó mucho. Así comenzamos a desarrollar lo que es hoy el Centro Cultural que desde hace dos años se vincula con Artex, para trasmitir, especialmente, la familiaridad del cubano”, señaló Amarilis.
Pero los “plasiteros” de Reus no solo vinieron a Santiago de Cuba para visitar La Placita; sostener encuentros; hacer la donación de medicamentos; desfilar en el Carnaval y ser distinguidos ante el público que abarrotó el área de la Avenida Garzón sino para continuar un periplo que los llevará por Holguín, Camagüey, Santa Clara, Trinidad y La Habana, incluida la casa matriz de Artex y el Instituto Superior de Arte, itinerario en que siempre pondrán por delante su nexo casi familiar, con la historia y la cultura en Cuna de la Revolución Cubana.
De izquierda a derecha: Juana, de Zaragoza; Sulay Vaillant Gala, gerente general de Artex Santiago; Amarilis, gerente de “La Plasita”; Jorge Alegret Senan, el cheff de “La Plasita”; Lisandra Mallet Portuondo, gerente de mercadotecnia de Artex, y Rafael Pérez, que enseña bailes cubanos en “La Plasita” de Reus