Santiago de Cuba,

Celia cual flor hermosa

12 January 2025 Escrito por  David Alejandro Medina Cabrales (estudiante de Periodismo)
Portal Cuba

Celia Sánchez Manduley es una figura emblemática de la historia de Cuba. Su vida estuvo marcada por extraordinarias anécdotas que la convirtieron en pilar fundamental para la nación. A pesar de su inmensa contribución, fue su singular humildad la que le dio fama. Como la Revolución, Celia era de, por y para los humildes.Para ella, la acción siempre fue más importante que la palabra.

El legado de Celia se refleja en su vasta obra. Desde el busto esculpido por Jilma Madera, que rinde homenaje a su compromiso con la patria en la cima del Turquino, hasta los parques, escuelas e instituciones que llevan su impulso y dedicación. Su influencia perdura, y siempre se podrá hablar de Celia en presente.

Celia fue una organizadora excepcional, construyendo estructuras sólidas para la lucha clandestina contra la tiranía de Fulgencio Batista. Nuestro querido Comandante Fidel Castro la reconoció como una figura insustituible antes y después del desembarco del Granma, subrayando su importancia al decir que la historia de esa etapa revolucionaria debería resaltar dos nombres: David y Norma, los seudónimos de Frank País y Celia.

Fue la primera mujer en empuñar un fusil en acciones guerrilleras y una de las fundadoras del pelotón femenino Mariana Grajales. Aunque hoy en día es común ver a mujeres en posiciones de liderazgo en la política y el ámbito militar, hace más de 60 años, los prejuicios estaban arraigados, incluso en las fuerzas progresistas. Ella fue pionera, demostrando que las mujeres podían ser fuertes, patrióticas y capaces de asumir tareas que muchos consideraban exclusivas de los hombres. No se conformó con ser un símbolo decorativo; su papel fue de acción y compromiso.

Las luchas por la plena emancipación de la mujer en Cuba, aún vigentes, encuentran en Celia Sánchez a una referente indiscutible. Su enfoque era una poética de la acción, siempre en busca de la equidad.

La historiografía revolucionaria también le debe mucho. Con un celo excepcional, atesoró documentos que, aunque parecían insignificantes en su momento, fueron cruciales para establecer fechas y esclarecer procesos en la historia revolucionaria.

En los años de creación de diversas instituciones, su liderazgo fue esencial. Su estrecha relación con Fidel se ha destacado como una de las colaboraciones más efectivas en la construcción de una nueva sociedad.

Celia Sánchez Manduley fue una mujer de gran sensibilidad, belleza serena y un apego genuino a las pequeñas alegrías de la vida. Se convirtió en uno de los pilares más sólidos de un proceso complejo y demandante. Su fallecimiento el 11 de enero de 1980 dejó un vacío, ya que aún tenía mucho que ofrecer.Su legado perdura, y su vida sigue inspirando a generaciones actuales y futuras.

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