Así se constata en la provincia Santiago de Cuba, a partir de un trabajo loable en la Asistencia Social, que hoy, 29 de octubre, deviene especial saludo al Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo.
Tal y como explicara en diálogo reciente, Viviana Rodríguez Balón, jefa del Departamento de Prevención, Asistencia y Trabajo Social de la provincia, con sede en San Francisco No. 421, entre Calvario y Carnicería, en Santiago de Cuba, “se dedica todo el tiempo necesario, de acuerdo a los programas establecidos, a atender a: los adultos mayores en situación de vulnerabilidad económica, las madres con hijos, que tienen discapacidad severa y otros problemas que impiden una adecuada inserción en la sociedad.
Cada caso es analizado al detalle y se aplican las medidas convenientes para la protección a los segmentos señalados, al igual que a familias en situación de vulnerabilidad y otras afectaciones semejantes, que impiden un normal desarrollo”.
De ahí que si bien pesa la responsabilidad de la Asistencia Social, como institución, se suman al preciado empeño, las esferas de Salud, Educación, las organizaciones de masas y el Gobierno, entre otros, en acción mancomunada para cumplir las máximas pretensiones de la nación, en razón del bienestar de cada individuo.
Los objetivos de este sistema de asistencia presiden todo un quehacer comprometido a contribuir que los cuidados se redistribuyan entre los diferentes actores sociales y económicos, y al interior de las familias sin discriminación de ningún tipo. Asimismo, reconocer la importancia de los cuidados para la sostenibilidad de la vida y el desarrollo, y favorecer la autonomía de las personas que requieren cuidados temporal o permanente, y de las personas cuidadoras.
La provincia Santiago de Cuba llega a este Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo con resultados plausibles, prestos a continuar creciendo, desde el necesario perfeccionamiento. En estos momentos se potencia con un amplio programa, destinado a la atención de 49 mil 176 núcleos en estado de vulnerabilidad, 238 madres de niños con discapacidad severa y otras situaciones de índole económica o social, requeridas de cuidados especiales.
Sucede que, a pesar de todas las dificultades económicas que atraviesa el país, la asistencia social no se descuida y es que todo cuanto se haga aquí por el bien de cada nativo, no asombra, y aún más con acento especial en los más necesitados. Por eso a este día le precedió una jornada, cual ajetreo festivo de amor y humanismo, que se hizo presente en visitas a hogares de ancianos, degustación de las llamadas caldosas solidarias en algunos barrios y otras expresiones afines.
La prosperidad individual y colectiva con el respaldo de la equidad y justicia social siempre serán fortalezas indisolubles de la obra construida por los cubanos.