Aprovechándose del temor que causan este tipo de eventos en la población, tanto los que publicaron como los que compartieron esta Fake New parecen desconocer la imposibilidad de pronosticar un terremoto hasta por los más avezados especialistas o equipos de medición.

No obstante al absurdo, la doctora Grisel Morejón Blanco, directora del Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas salía al traste y en comparecencia radial a la emisora Cmkc aclaró que no se pueden predecir los sismos y que, aunque ha habido recientes temblores en Granma, no hay evidencia que sugiera un inminente sismo de gran magnitud en Santiago. Recalcó que no hay evidencias de un peligro inmediato.

"Los sismos ocurren en un determinado sitio, y en el momento que ocurren es que nosotros podemos analizarlo y podemos dar todos los parámetros e informar. No hemos creado ninguna expectativa. Estamos monitoreando la actividad sísmica constantemente"...

Morejón Blanco hacía un llamado que sí es necesario, el de saber actuar acorde a las medidas protocolares establecidas, a mantener la calma y a evitar lugares de riesgo en el momento de la ocurrencia de un sismo.

Una figura seguida, conocedora y especialista en estos temas, el doctor Enrique Arango, jefe del Servicio Sismológico Nacional publicaba en su perfil en Facebook:

"Hasta las 2:00 pn del día de hoy, se han registrado un total de 1943 réplicas de los terremotos registrados el día 10 de noviembre.

"En el día de hoy personas irresponsables han estado diciendo que va a ocurrir un terremoto fuerte en esta ciudad en las próximas horas, creando pánico en escuelas, centros de trabajo, edificios y otros lugares públicos. Esta información es totalmente falsa. Los terremotos no se pueden predecir en corto o mediano plazo".

Por su parte, otra figura pública, la Primera Secretaria del Partido en la provincia, Beatriz Johnson Urrutia se personaba en el Centro Nacional de Investigaciones Sismológicas (Cenais), visita habitual desde el pasado día 10, donde además de conocer sobre el comportamiento de la sismicidad llamaba a "mantenemos alertas, y eso es lo que pedimos al pueblo santiaguero: informarse sobre lo que debe hacerse antes, durante y después de un sismo".

"Algunas personas insisten en crear pánico en la población circulando mensajes en redes sociales sobre la proximidad de un sismo de gran magnitud en Santiago de Cuba. Por eso es importante seguir a los medios de comunicación oficiales, así como las cuentas, perfiles y canales institucionales y de las autoridades".

Entonces el llamado y la alerta están hechas, probando como nunca el poder de la información, y el daño de la desinformación.